- En general, no se lo cuentas a nadie (bueno, excepto a tu pareja. Y a tu madre también porque madre no hay mas que una. Y a tu mejor amiga, que se habría dado cuenta igualmente. Y a tu compañero de trabajo, tu vecina…), pero bueno, así en general no se lo cuentas a nadie.
- Cuando te levantas piensas en ello. Durante el día piensas en ello. Por la noche piensas en llo. No puedes evitar pensar en ello todo el día.
- Las semanas pasan muy pero que muy lentamente.
- Vas por la calle como si llevaras un maletín lleno de dinero. Tienes la sensación que todo el mundo te está mirando.
- Te alegras de reconocerte en los primeros síntomas del embarazo (sí, hasta te alegras de vomitar, de tener náuseas, de estar cansadísima… ¡una fiesta!).
- Calculas la fecha prevista de parto unas 10 veces al día según TODAS las webs habidas y por haber.
- Te acaricias la barriga cuando nadie te ve.
- Sales a tomar «unas cañas» y se hace silencio sepulcral cuando tu pides una infusión.
- Por la calle se multiplican las mujeres embarazadas.
- Tu pareja no te deja coger nada de peso (aprovecha que ya se le pasará…).